La reducción en 12,95 por ciento del embarazo adolescente en Bogotá es un logro que tiene que ver con el uso de una herramienta muy útil para los jóvenes, Sexperto, en la que estos pueden formular sus preguntas sobre sexualidad. La página, lanzada en marzo de 2017 por una alianza entre el Distrito Capital y la Fundación Santa Fe, ha recibido casi 600.000 visitas y tiene un costo de operación mensual promedio de 6 millones de pesos. Es decir, es una herramienta buena, bonita y barata que ya demuestra su eficiencia.
(Visite la plataforma aquí: sexperto.co)
Las preguntas más frecuentes de los jóvenes, que han entrado desde 97 países, pero que en un 86 por ciento son de Bogotá, son:
1) ¿Cuándo debería tener relaciones sexuales por primera vez?
2) ¿Eyacular por fuera previene el embarazo?
3) ¿Cómo sé si soy bisexual?
4) ¿Se pueden usar dos condones al mismo tiempo?
5) ¿Puedo contraer infecciones de transmisión sexual a través del sexo anal?
Un grupo de trece personas –enfermeras, sicólogas, médicas, ginecólogas, pediatras trabajadoras sociales, abogados, una politóloga y un especialista en salud pública– da respuesta a cualquier hora del día y procura adjuntar referencias bibliográficas de artículos publicados en revistas científicas, o de normativa colombiana sobre derechos sexuales y reproductivos.
“La plataforma garantiza el anonimato de quien pregunta y ofrece agendar la consulta de anticoncepción a la que todos los afiliados a una EPS tienen derecho, pero que muy pocos usan.”
Entre las consultas hay algunas que quienes manejan la página consideran particulares. Por ejemplo:
1) ¿Tragar semen es malo?
2) ¿Es pecado masturbarse?
3) ¿Es posible que una mujer viole a un hombre?
4) A mi pareja le excita ahorcarme mientras tenemos relaciones sexuales, pero a mí no me gusta. ¿Qué puedo hacer?
5) Si soy mayor de edad, ¿es buena idea tener relaciones sexuales con una persona que es menor de edad?
6) ¿Cómo puedo disfrutar más de mi vida sexual?
7) ¿Una persona con algún tipo de discapacidad puede tener sexo?
8) ¿Ser gay es pecado?
Las plataforma garantiza el anonimato de quien pregunta y ofrece agendar la consulta de anticoncepción a la que todos los afiliados a una EPS tienen derecho, pero que muy pocos usan. Las preguntas evidencian la mezcla de curiosidad, mito y prejuicios con los que la mayoría de las jóvenes viven su sexualidad y, sobre todo, la necesidad de respuestas que no encuentran ni en la familia ni en los colegios.
No es lo ideal que padres y madres deleguen esta conversación a una plataforma tecnológica, pero es una excelente ayuda si la charla sobre sexualidad con sus hijos los hace poner rojos y dar respuestas cigüeñescas.
Pronto entrarán 4 EPS privadas a esta web; enhorabuena, pues la mitad de los embarazos en adolescentes son de mujeres afiliadas a este régimen de salud y estas EPS están quedadas en programas de prevención.
Si bien es un reto para cualquier ciudad que su población entre en declive, caso evidente de Bogotá, donde los nacimientos disminuyeron 7 por ciento de 2016 a 2017, el descenso de embarazos no planeados, especialmente en menores de 18 años, es una gran noticia. Tenemos a más mujeres jóvenes pensando en cómo salir adelante ellas y a menos niños y niñas soportando una crianza llena de falencias. Ya para otra columna investigaré sobre cómo enfrentar el reto del envejecimiento poblacional.
CLAUDIA PALACIOS